Los embriones no saben que es sábado

Rita Levi-Montalcini en el laboratorio

Mujer y judía para más inri, nacida en una época en la que regían los valores de la sociedad victoriana (la mujer debía consagrarse al cuidado de su prole) pasó por encima de todos los obstáculos -incluidas las leyes raciales del fascismo- con una voluntad de hierro. Llegó a montar un laboratorio clandestino en el sótano de su casa, mientras se escondía de los camisas negras. Siendo ya muy vieja dijo en una ocasión: "El cuerpo hace lo que quiere. Yo no soy mi cuerpo: soy mi mente."
Mujer admirable. Rita Levi-Montalcini ha muerto hoy en Roma a los 103 años de edad.

2 comentarios:

  1. Eso no impidió que fuese una mujer muy elegante. Un ejemplo a seguir.

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  2. Menuda mujer menuda. Su espíritu tuvo que ser ferreo como el acero

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