Cuaderno relativista y olé

Usted viaja en tren (vamos a suponerlo que con suposiciones se hace la ciencia). El tren se detiene frente a otro tren. Uno arranca despacio, ¿cuál de los dos? Súmese la velocidad de la luz, la ausencia del éter, el ascensor en caída libre, el principio de equivalencia, la paradoja de los gemelos, relojes que atrasan, etc. Vivimos en una época (desde hace un siglo) en la que la teoría de la Relatividad lo penetra todo. Sin esa teoría serían inconcebibles los agujeros negros, el Big Bang y las ondas gravitacionales. El universo es relativista. Menuda hostia cosmológico-epistemológica nos hemos dado, porque a la época de ese formidable descubrimiento -¿o invención?- corresponden los personajes ínfimos de Kafka, el hombre de la multitud de Poe, el hombrecillo de la gran ciudad estilo Leopold Bloom, el "desencantamiento del mundo" de Weber, el crack del 29, las dos guerras mundiales y el descenso a tercera del Real Oviedo. Léase el poema de Nicanor Parra "Los vicios del mundo moderno". La Historia, con permiso de D'Alembert y de Diderote, como desengaño de la Razón, la cual bien puede estar al servicio de los propósitos más criminales, como mostraron Adorno y Horkheimer. Para la inmensa mayoría de los humanos esta vida consiste en nacer en muy mal sitio, en trabajar de sol a sol, en estar continuamente acosado por la miseria, en ser una pieza que cobrar para las grandes multinacionales, en ser un banco de datos para distintas organizaciones, en procrear haciendo la bestia de dos espaldas, en morir de mala manera (muchísimos violentamente) y en caer inmediatamente en el olvido eterno. Lo que dijo Hobbes de la vida en estado de naturaleza. Es decir, una mierda. Ya, pero vivimos en un universo relativista; sí, y Bruto es un hombre honorable. Aunque la vanidad quiera engañarme (tengo un blog!) pertenezco a esa inmensa mayoría de la que Schopenhauer dijo que era un producto manufacturado de la naturaleza. Para rellenar horas en apariencia vacías y dar un poco de sentido a este desgaste, o mejor dicho, a esta putrefacción diferida, compongo un cuadernillo relativista que consta de los siguientes artículos científicos:

"Espacio y Tiempo" de Minkowski (1908)
"Esbozo de una teoría de la relatividad generalizada y una teoría de la gravitación" de Einstein y Grossmann (1913)
"Fundamentos formales de la teoría de la relatividad general" Einstein (1914)
"Explicación del movimiento del perihelio de Mercurio según la teoría general de la relatividad" Einstein (1915)
"Los fundamentos de la física" (primera comunicación) de Hilbert (1915)
"Las ecuaciones de campo de la gravitación" de Einstein (1915)
"Sobre el campo gravitatorio de un punto de masa según la teoría de Einstein" de Karl Schwarzschild (1916)
"Sobre el campo gravitatorio de una esfera de líquido incompresible según la teoría de Einstein" de Karl Schwarzschild (1916)
"Fundamentos de la teoría de la relatividad general" de Einstein (1916)
"Sobre la teoría de la gravitación de Einstein y sus consecuencias astronómicas" (Primera parte) de W. de Sitter (1916)
"Principio de Hamilton y teoría general de la relatividad" de Einstein (1916)
"Los fundamentos de la física" (segunda comunicación) de Hilbert (1916)
"Sobre la teoría de la gravitación de Einstein y sus consecuencias astronómicas" (Segunda parte) de W. de Sitter (1916)
"Consideraciones cosmológicas de la teoría general de la relatividad" de Einstein (1917)
"Sobre la teoría de la gravitación de Einstein y sus consecuencias astronómicas" (Tercera parte) de W. de Sitter (1917)
"Principios de la teoría general de la relatividad" de Einstein (1918)
"Una nueva ampliación de la teoría de la relatividad" de Weyl (1919)
"La teoría de la relatividad en la asamblea de científicos de Bad Nauheim" de Weyl (1921)
"Sobre la curvatura del espacio" de Alexander Friedman (1922)
"Observación al trabajo de Friedman "sobre la curvatura del espacio"" de Einstein (1922)
"Un universo homogéneo de masa constante y de radio creciente que explica la velocidad radial de las nebulosas extragalácticas" de Georges Lemaitre (1927)
"Sobre los fundamentos de la cosmología relativista" de H. P. Robertson (1929)
"Sobre un sistema estacionario con simetría esférica formado por muchas masas gravitantes" de Einstein (1939)

A partir de 1905 y durante esos años fue concibiéndose, asentándose, afinándose, ampliándose, verificándose la teoría de la relatividad. Hay, creo yo, un momento crítico en toda esta movida de espacio-tiempo y gravitación: sucede en noviembre y diciembre de 1915 cuando Hilbert y Einstein se apuran por ver quién llega antes a completar las ecuaciones de campo. Tuvo adversarios la teoría: Max Abraham (sin entrar en el terreno personal) o Philip Lenard (que le tenía fuerte antipatía a Einstein por ser judío), pero ha demostrado ser un edificio a prueba de terremotos y prejuicios raciales y de toda clase. Bella catedral intelectual de nuestra época científico-técnica con muchos puntos de contacto con la filosofía (es conocida la polémica entre Einstein y Bergson sobre la naturaleza del tiempo, sobre esto hay libro El físico y el filósofo, de Jimena Canales).

En 1911 el físico Max von Laue en su libro El principio de relatividad (1911) escribía lo siguiente: "En los cinco años y medio que han transcurrido desde que Einstein asentara la teoría de la relatividad esta teoría ha ido despertando una creciente atención. Ciertamente esta atención no es por completo aprobación. Algunos investigadores, entre los cuales hay nombres muy conocidos, consideran que su justificación empírica es insuficiente". 

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