Nuestro sombrío presente

Primero el Brexit. Ahora Colombia. En noviembre, ¿Trump? Si gana este enemigo de la razón y la justicia lo tendré claro: existirán síntomas evidentes de que la especie a la que pertenecieron Darwin, su abuela y San Francisco de Asís se está imbecilizando, muy democráticamente, a marchas forzadas. No sé, a lo mejor estoy exagerando.

30 comentarios:

  1. No amigo no exageras. La involución de la especie se aceleró a comienzos del siglo pasado, ya lo decía Adorno.

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  2. Es posible. Veremos en noviembre qué pasa en USA.

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  3. "Nada nuevo hay bajo el sol", dice el Eclesiastés.

    Y en otro lugar de la Biblia se dice que "el número de los tontos es infinito."

    La especie ha sido, pues, siempre idiota. Otra cosa es que el progreso nos lo haga olvidar de vez en cuando.

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    1. El celebrado progreso, ese engañador. Muy celebrado en el siglo XIX, siglo tonto por excelencia. (El siglo XX no fue tonto, fue horrible). En lo esencial somos contemporáneos del hombre de las cavernas. No podemos negar a la naturaleza (aunque hoy podamos destruirnos del todo, bien con armas atómicas, bien contaminando).

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  4. A uno, personalmente, le dan cierto repelús esas afirmaciones sobre la estupidez de la especie, desgracia general de la que, naturalmente, está excluido el opinador (por otra parte, si no lo estuviese, podríamos olvidarnos de su opinión, por irrelevante). No creo que quienes apoyen a Trump (que espero, y deseo, que no gane) sean más peligrosamente tontos que quienes en su día apoyaron a Hitler con masiva convicción. Y no creo que el ser humano sea idiota, sino capaz de lo mejor y de lo peor. Y se trata, pienso, de apoyar lo primero y combatir lo segundo, en la medida de nuestras posibilidades. Lo otro, el cómodo fatalismo de quien se sabe más listo que nadie, pero tristemente rodeado de un océano de idiotez que corre el riesgo de justificar de antemano cualquier abstención, y cualquier condena, ya digo que me es poco simpático.

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  5. Mantengo mi afirmación de que el ser humano es estúpido. Al menos más estúpido que inteligente; digamos que es inteligentemente estúpido. Creamos ingenios maravillosos: hacemos un uso penoso (y muchas veces espantoso) de los mismos. Es astuto el ser humano y maravilloso verlo cavilar.

    Respeto y admiro a los votantes que tenga Trump, que seguro son personas inteligentes y bondadosas, si un voto es capaz de revelar la condición intelectual y moral de una persona. Respeto y admiro a los que participan, promueven, difunden y siguen ciertos programas de TV -maravilloso invento que esparce la Cultura (aunque yo nunca he visto a esa señora, pero sí conozco a muchos que viven regaladamente a su costa). Respeto y admiro a los profesionales de la publicidad y a los consumidores a los que va dirigida. Es evidente que el ser humano no se deja engañar fácilmente. Respeto y admiro a nuestros gobernantes (nacionales y extranjeros) por su altura de miras, su amplia formación humanística y su integridad,

    ¿Quién soy yo para procurar mirar con mis propios ojos la sociedad que me rodea, o más generalmente la condición humana y el abismo de animalidad que hay en mis entrañas y, por extensión, en la de cualquier ser humano? Eso es una soberbia intolerable.

    Me temo que nos dirigirnos, una vez más, al precipicio, como fueron al barranco aquellos votantes de Hitler a los que se alude. Y bien: el ser humano no es estúpido; es evidente que aprende de sus errores. Pero esto son jeremiadas de un don nadie. Cualquier prestigioso intelectual se mofaría de mis simplezas. No sé qué hago opinando, si no hago más que aumentar la confusión. Porque el ser humano es inteligente, como demuestra la perfección que ha logrado inventando un deporte como el fútbol (tenía que mencionar el fútbol, compréndame, recurso fácil,lo sé).

    Conste que no culpo enteramente al ser humano de su tontería y su locuacidad. Es la naturaleza, tan generosa siempre, la que nos saca de la tierra y nos regresa a ella, después de unos cuantos latidos del corazón. No sabemos por qué ni para qué. Yo estoy perplejo, sin más.

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  6. Pues yo mantengo la mía. Yo NO DIGO que el ser humano sea "inteligente", así, sin más: generalización que me parecería tan inane como la otra. Dije, y digo, que es capaz de lo mejor y de lo peor.

    Respecto a si nos dirigimos o no al abismo, no lo sé; sí que los predictores de catástrofes tienen la ventaja de que, si no llegan, nadie, ni ellos mismos, se acordará de su profecía para reprochársela; si llegan, en cambio, se darán la satisfacción sombría de haber tenido razón.

    Y, de hecho, si la catástrofe que prevén se mantiene dentro de ciertos límites (es decir, no se refiere al cercano fin del Universo, o de la Tierra, o del hombre; si son cosas algo más abarcables) acabarán teniendo razón. Si de 1000 aciertan una, dado que como dije ni ellos mismos recordarán los 999 fallos, lo verán como una confirmación indiscutible del acierto de su postura. Y, estadísticamente, ni es demasiado difícil ni es un éxito tener razón una de cada mil veces.

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  7. @ Anónimo

    Hay que estar muy ciego para no ver que el ser humano es profundamente estúpido. Cinco mil años de civilización (por lo menos) en un bello planeta que podría ser un edén, para llegar a la situación actual: guerras, miseria, hambre, injusticia por todas partes, y un sistema económico único que está destruyendo el planeta y ha desembocado en el hecho de que el 1% de la población mundial posea la mitad de la riqueza. Todo ello a pesar de las enseñanzas del hinduismo, del budismo, del cristianismo, del sufismo, del taoísmo, del zen y de los grandes pensadores lúcidos.

    ¿Cómo es posible que el mundo creado por una raza tan inteligente como la humana sea tan violento, injusto, ilógico y esperpéntico? Si los hombres no son imbéciles, ¿por qué destruyen el planeta en el que viven?

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    1. Si la explicación de la situación político-económico-ecológica catastrófica de nuestro planeta no es la estupidez de la raza que lo habita, ¿cuál es entonces?

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    2. No se desazone por mi respuesta; miembro como al fin soy de la raza humana, la "profunda estupidez" que en cuanto tal me aflige la justifica sin más. Usted que, según supongo, goza del privilegio de no pertenecer a ella, compadézcase más bien de quienes no disfrutamos de tan incomparable ventaja.

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    3. La verborrea barata disimula mal la ausencia de respuesta a mi pregunta.

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    4. Pues qué le vamos a hacer, transhumano amigo; los meros humanos, usted lo comprenderá, no damos para más.

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    5. @ Anónimo

      O sea que tú, tras ver el telediario o leer la prensa cada día, te dices: "¡Qué inteligente es el ser humano! ¡Qué maravilla este mundo! ¡Qué suerte tengo de vivir en un planeta tan bien organizado!".

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    6. Si "El lejano" aprendiera a leer, o se tomase el trabajo de ejercer con algún cuidado esa estimable habilidad, caso de que ya la posea, vería que en otra nota mía anterior se contiene lo que literalmente copio: "Yo NO DIGO que el ser humano sea "inteligente", así, sin más: generalización que me parecería tan inane como la otra. Dije, y digo, que es capaz de lo mejor y de lo peor". No tiene demasiado sentido, después de que uno ha afirmado con toda claridad que "la capital de Suecia es Estocolmo", contestarle: "Puesto que usted pretende que la capital de Suecia es Budapest", y "razonar" a partir de ahí. No queda uno muy bien, ¿no le parece?

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    7. Decir que el ser humano "es capaz de lo mejor y de lo peor", además de ser una trivialidad más vieja que la orilla del río que debería darte vergüenza utilizar, es una manera de desviar la conversación y, una vez más, de no responder a la pregunta esencial: la Historia y el estado actual del mundo, ¿prueba que la especie humana es inteligente o que es idiota?

      O dicho de otra manera: si un extraterrestre viniera a nuestro planeta y observara a los seres que lo pueblan, ¿qué pensaría? ¿Qué diría de regreso a su propio planeta: que la especie humana es inteligente o idiota? ¿Que reina en la Tierra la paz, la concordia, la justicia, el respeto de la naturaleza y los animales, y que está por ello poblada por seres inteligentes, o que nuestro planeta es un lugar caótico, lleno de violencia, desastrosamente organizado y medio devastado ya, y que está, pues, habitado por seres de una inteligencia más corta que las mangas de un chaleco?

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    8. "El lejano", como es típico de quien se siente poco seguro de lo que dice, necesita reforzarlo con alguna descalificación personal presuntamente hiriente ("debería darte vergüenza"), para ver si, caso de no convencer, al menos intimida. En realidad, pero no parece que pueda comprenderlo, actuando así sólo se descalifica personalmente a sí mismo.

      Si un extraterreste viniera a nuestro planeta, lo que pudiera pensar de lo que viese dependería de sus propias ideas. Es obvio, leyéndole, que para usted hablar de "un extraterrestre" equivale ahí a hacerlo de "una verdadera inteligencia" (y, secretamente, también que eso a su vez equivale a "una como la suya"). No tenemos ninguna seguridad de que ello hubiera de ser así; y, de hecho, como recordaba recientemente Stephen Hawking, buscar o desear semejante contacto bien podría no ser una buena idea, sino una ocurrencia completamente (y acaso irremediablemente) desastrosa.

      En todo caso, si en efecto el tal extraterrestre fuera como a usted le gusta imaginarlo, no tendría por qué plantearse las cosas en esos términos de blanco/negro, bueno/malo, inteligente/idiota que usted prefiere: simplificaciones sin duda muy cómodas, pero poco realistas. Por más que ello le irrite, vería seguramente cosas buenas y otras menos buenas; y actuaría, esperémoslo, teniendo en cuenta no sólo las segundas, sino también las otras.

      Supongo, por lo que dice, que de ser usted el extraterrestre no atendería a semejantes trivialidades, condenaría sin paliativos y, si hubiera de actuar, lo haría sin respeto ninguno a la especificidad puramente humana, y de un modo bien poco benévolo. Esperemos, por el bien de todos, que el Klaatu de turno se le parezca poco; si no fuera así, y como suele decirse, que Dios nos coja confesados.

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    9. ¡Cuánta tontería para ocultar la ausencia de respuesta a mi pregunta sobre la estupidez o la inteligencia de la especie humana!

      Para empezar deberías aprender a predicar con el ejemplo:

      "Anónimo", como es típico de quien se siente poco seguro de lo que dice, necesita reforzarlo con alguna descalificación personal presuntamente hiriente ("si "El lejano" aprendiera a leer"), para ver si, caso de no convencer, al menos intimida."

      Luego deberías reflexionar un poco más antes de escribir: decir que no tenemos "ninguna seguridad" de que un extraterrestre que pudiera venir a la Tierra fuera inteligente demuestra una frivolidad mental que me deja patidifuso. ¿Cómo se podrían hacer viajes interestelares siendo tonto? ¿Y cómo una civilización lo suficientemente avanzada para hacerlos podría sobrevivir sin una ética mucho más seria que la nuestra? A tu edad deberías saber ya que el progreso científico sin ética o sin espiritualidad no puede desembocar más que en la autodestrucción.

      Y para acabar, cualquier extraterrestre de una civilización mucho más avanzada que la nuestra nos condenaría sin paliativos pour una sola y simple razón: porque comprendería que estamos autodestruyéndonos.

      Así que deja de sodomizar moscas en pleno vuelo y reconoce que con ejemplares como tú, que no ven el desastre en el que nos hallamos y la catástrofe que nos espera si no dejamos de comportarnos estúpidamente, la civilización humana no puede ir muy lejos.

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    10. Dejémoslo: discutir con alguien de una "frivolidad mental" como la mía, de tal envergadura que, "con ejemplares como yo... la civilización humana no puede ir muy lejos" (cosa natural, digo yo, dado que no existe; lo que hay, según nos ha explicado repetidamente, es su contrario, la barbarie y la estulticia humanas), es una manera de perder el tiempo poco justificable. Déjenos pues, a Stephen Hawking y a mí, por imposibles, ya que a nuestra edad no hemos alcanzado a comprender la irrefutable verdad que nos explica.

      Y consuélese pensando que inteligencias tan limitadas e inanes como las nuestras, difícilmente podrán tener una influencia grande en el porvenir de esta lamentable humanidad, mientras que una tan brillante como la de usted siempre podrá justificarnos ante cualquier alienígena que se deje caer por aquí.

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  8. Se apasionan ustedes demasiado. Creo que el asunto no merece tanto furor. No se insulten. Discutan sobre la estupidez humana si quieren: pero no se insulten. Si quieren insultarse háganlo, no me importa, pero fuera de este blog.

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  9. Qué ironía que comentando la estupidez o inteligencia humanas y sus efectos sobre el planeta, dos humanos acaben discutiendo e insultándose. Toda una lección.

    Saludos

    Otro anónimo

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    1. Sería, en efecto, irónico que ocurriese eso (lo de insultarse; la discusión misma me parece necesaria, y nada criticable). Pero, honestamente, no soy consciente de haber incurrido en el insulto. Rogaría por tanto a mi tocayo me indicase dónde, exactamente, lo he hecho; si es así, estoy muy dispuesto a pedir perdón. Pero no confunda el insulto con, justamente, la ironía, que es algo muy distinto.

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  10. Toda la discusión esta atravesada de comentarios que aluden a la soberbia, la ignorancia o la estupidez del otro. No hace falta escribir "imbécil" o "idiota" para insultar.

    Por otro lado, yo, más que ironía, veo sarcasmo en su conversación con El lejano. Lo mismo puedo decir de su interlocutor. Insulto directo no, en efecto.

    Soy yo el que le pide perdón.

    Un saludo

    Otro anónimo

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  11. Hay personas que se aburren en la vida, como el primer anónimo, y que, creyéndose muy inteligentes y superdotados para la controversia, van a los blogs únicamente a discutir, para lo cual comienzan provocando (primera frase de dicho anónimo: "A uno, personalmente, le dan cierto repelús esas afirmaciones sobre la estupidez de la especie, desgracia general de la que, naturalmente, está excluido el opinador...").

    Cuando se encuentran con algún comentador que, sin miramientos, les da un par de sopapos virtuales, se ponen nerviosos ("si "El lejano"
    aprendiera a leer, o se tomase el trabajo de ejercer con algún cuidado esa estimable habilidad, caso de que ya la posea"), huyen del tema central de la discusión e intentan disimularlo con ironías de vejete inofensivo ("No queda uno muy bien, ¿no le parece?").

    Y cuando los sopapos redoblan, utilizan los viejos argumentos de manual de moral jesuítico de hace 100 años por lo menos ("El lejano",
    como es típico de quien se siente poco seguro de lo que dice, necesita reforzarlo con alguna descalificación personal presuntamente hiriente [....] para ver si, caso de no convencer, al menos intimida"), sin darse cuenta de que se pueden volver contra ellos, que fueron los
    primeros en intentar descalificar a su antagonista (ver citas anteriores).

    Al final, cuando ven que las cosas se ponen mal y que el oponente que tienen enfrente es del tipo "duro de pelar", se enfadan y abandonan la
    partida con el rabo entre las piernas, no sin antes intentar hacernos comprender que rechazar sus opiniones es rechazar también las de grandes sabios ("Dejémoslo: discutir con alguien de una "frivolidad mental" como la mía, [...] es una manera de perder el tiempo poco justificable. Déjenos pues, a Stephen Hawking y a mí, por imposibles, ya que a nuestra edad no hemos alcanzado a comprender la
    irrefutable verdad que nos explica.").

    Cuenta Ceronetti en uno de sus libros que, tras haber dicho un día muchas tonterías en una entrevista en la radio, se había autocastigado haciendo un ayuno. Esperemos que nuestro amigo Anónimo le imite para que se le quiten las ganas de ir a los blogs a provocar "pelapollos".

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    1. Llevo interviniendo en éste y en otros blogs varios años. En concreto, en el de José Luis García Martín tuve ya ocasión, hace bastante tiempo, de polemizar con "El lejano". No lo he hecho en cambio con otros intervinientes en el mismo blog porque, al contrario que dicho "Lejano", no toman una diferencia de criterio como un insulto personal.

      Que éste es, sin embargo, su caso, resulta manifiesto sin más que leer su intervención última, donde se verá que en ningún momento se refiere a sus propios argumentos, sino a sus "sopapos". Es obvio que quien no quiere, según confesión propia, discutir con el otro, sino agredirle, es el culpable de que se haga imposible todo intercambio civilizado de opiniones.

      Como resulta obvio, una vez más, cuando el mismo "Lejano" se refiere a su propósito en esta discusión, que según él mismo no sería convencerme, o simplemente exponer (con todo derecho) su opinión distinta de la mía, sino obligarme a "abandonar la partida con el rabo entre las piernas".

      Es, repito, esa concepción pugnaz, pendenciera, de la discusión, que ciertamente no es la mía, el verdadero problema. No verá, ni él ni nadie, que yo manifieste deseo alguno de que "deje de ir a los blogs" (hace muy bien en expresar su opinión donde le dejen) o de que se retire de ninguna discusión más o menos humillado (en ellas no debe buscarse, recordando la célebre frase de Unamuno, "vencer", y menos humillar, al contrario, sino convencer si se puede, y en todo caso dejar constancia de la opinión de uno, y de las razones en las que la apoya).

      Que "El Lejano", según (como dije) él mismo confiesa, sea incapaz de hacer eso, porque no sabe o porque no le basta, es problema suyo. Yo no le pido que "se autocastigue" (ni soy quién, ni es asunto mío), sino que se convenza, si puede, de que buscar en una discusión la derrota o la humillación del otro no es el camino correcto. Y, si no puede convencerse de ello, que sepa que tiene un problema. Por mucho que le irrite que se lo digan.

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  12. Toda tu verborrea (ilegible) es inútil. Las cosas son muy claras: tú has llegado a este blog y te has puesto a insultar y a provocar a su propietario y a mí: "A uno, personalmente, le dan cierto repelús esas afirmaciones sobre la estupidez de la especie, desgracia general de la que, naturalmente, está excluido el opinador [...] Lo otro, el cómodo fatalismo de quien se sabe más listo que nadie, pero tristemente rodeado de un océano de idiotez [...] ya digo que me es poco simpático."

    Ésa es la realidad. Si las consecuencias de esa actitud estúpidamente agresiva no te gustan, repróchatelas a ti mismo.

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    1. Es la última vez que le contesto (me parece inútil). Decir que determinado modo de expresarse "me da cierto repelús" y que "me es poco simpático", le parecerá a usted un insulto. A mí no. Me limito a contar mi impresión, nada más. (En cambio, y conste que yo no se lo reprocho, decir que "la especie ha sido, pues, siempre idiota", y todas las demás cosas que comenta respecto al ser humano, sí me parece que conlleve voluntad denigradora, insultante. Pero eso es su problema).

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    2. ¡Qué casualidad! Has olvidado citar las dos frases más agresivas e insultantes de ese primer mensaje: "desgracia general de la que, naturalmente, está excluido el opinador [...] el cómodo fatalismo de quien se sabe más listo que nadie".

      Una vez más: cuando se entra en un blog para provocar a la gente hay que atenerse a las consecuencias.

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  13. Corregidme si me equivoco, pero no leo en ningún párrafo que nadie diga "que somos estúpidos".
    La forma del verbo quizás nos libere de mirarnos al espejo y decirnos a nosotros mismos que somos idiotas, es un peso que nos quitamos de encima. Pero claro, me podéis decir que es una forma de hablar y que no nos excluimos de ser estúpidos por hablar en otra persona.
    Claro que Trump es estúpido, pero a mí lo que me preocupa es que lo veo un tipo muy peligroso. Más que lo demás políticos.

    Por cierto, leí hace poco una cita de Nietzsche que decía así:

    "La mujer fue el segundo fallo de Dios. La mujer es, por su esencia, serpiente, Eva- Esto lo sabe todo sacerdote; de la mujer viene todo infortunio al mundo, esto lo sabe asimismo todo sacerdote. Por consiguiente, también la ciencia viene de ella..."

    Me recuerda al estúpido de Trump y su disculpa ante lo que dijo de las mujeres. Porque disculparse de tan miserable opinión sobre ellas en unas elecciones es de lo más miserable que se puede tolerar.

    Y no me siento ofendida, aunque parezca lo contrario. Solo que de estúpido y estúpidas, es verdad que abunda el mundo-

    Si se fijan, no he dicho abundamos...:)

    ¿Para dónde miraba Nichellll? ¿Para fuera o para adentro?

    https://es.wikipedia.org/wiki/Friedrich_Nietzsche#/media/File:Friedrich_Nietzsche_drawn_by_Hans_Olde.jpg


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  14. "Hay que estar muy ciego para no ver que el ser humano es profundamente estúpido". Primera frase de la nota de "El lejano", 8 de octubre de 2016, 13:48. Y no es la única. Yo, ya lo dije, no estoy de acuerdo. El ser humano es muchas cosas, y la estupidez, abundante; pero tiene también muchas cosas buenas. Olvidarlo no me parece justo; ni siquiera sensato. Ni "inteligente", desde luego.

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  15. Anónimo, no me he explicado bien (es lo que tiene la ironía) _que no todos "somos estúpidos"_.
    Ni los aquí presentes. Yo no me miro y me digo ¡qué estúpida soy siempre!. Lo que no quita que haya cometido estupideces.

    Lo que ocurre es que cuando nos trasladamos a los actos de otras personas, a sus opiniones cuando son como las de Trump que es por donde ha empezado Francisco Alba, nos carcome por dentro que tengamos que aguantar a tipos así y solo poder revelarnos de esta manera.
    Tendemos a generalizar.




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