Detrás de una ventana, en un bloque de edificios de las afueras, he visto lo que pretendía ser un esquemático árbol de navidad: un triángulo luminoso formado por diez puntos en cuatro líneas. Quizá en ese piso viva un miembro de la escuela pitagórica, porque lo que había representado era el Tetractys, símbolo sagrado de aquella religión. Poco después, en el borde de un paso de cebra, estaba pintado un hermoso triángulo rectángulo. Con esas sutiles señales, ¿qué carayo quieres de mí, Pitágoras?
Una entrada perfecta.
ResponderEliminarPitágoras quiere que hagas de guardia de tráfico y de camino, seas el símbolo de Navidad entre los coches :)
Hombre, muy seguro estás de que Pitágoras te llamaba A TI. ¿Y si es a mí? (Es broma, claro). Pero bueno, si de verdad te llama, ponte, y dile que muy bueno lo suyo, pero que se nos aclare un poco, que nos tiene hechos un lío.
ResponderEliminarEstas antiguas sectas tienen sus misterios y sus iniciados. Como en Eleusis. El camino ancho para la mayoría, el estrecho para los elegidos.
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