Los historiadores no se ponen de acuerdo sobre la existencia de un país que unos llaman Ospännhia y otros Aespannha. Se ignora todo de él. ¿Quiénes lo habitaban? ¿Qué lengua hablaban? Es un misterio que tal vez nunca se resuelva.
No sé por qué pierdo el tiempo en leer los diarios y en ver los informativos. La actualidad es efímera y lo que ayer sucedió ya nada importa.
¿Qué importancia tiene lo que me ocurra si viví hace muchos siglos, a principios del siglo XXI, en un país olvidado que hablaba una lengua olvidada?
Es un descanso sabernos tan efímeros y carentes de importancia
ResponderEliminarSí, es un alivio. Lo bueno y lo malo pasan pronto. Todo es fugaz.
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