Der Mensch ist diese Nacht, dies leere Nichts, das alles in ihrer
Einfachheit enthält, ein Reichtum unendlich vieler Vorstellungen,
Bilder, deren keines ihm gerade einfällt oder die nicht gegenwärtige
sind. Dies [ist] die Nacht, das Innre der Natur, das hier existiert –
reines Selbst. In phantasmagorischen Vorstellungen ist es ringsum Nacht;
hier schießt dann ein blutig[er] Kopf, dort ein[e] andere weiße Gestalt
hervor und verschwinden ebenso. Diese Nacht erblickt man, wenn man dem
Menschen ins Auge blickt – in eine Nacht hinein, die furchtbar wird; es
hängt die Nacht der Welt hier einem entgegen.
El hombre es esa noche, esa nada vacía, esa noche que lo envuelve todo
en su simplicidad, una infinita variedad de representaciones, de
imágenes, ninguna de las cuales es en ese momento pensada ni está
presente. Lo que existe aquí es la noche, la naturaleza en su
interioridad, el yo en su pureza. En torno a esas representaciones
fantasmagóricas se cierne la noche: aquí aparece bruscamente una cabeza
ensangrentada, ahí una forma blanca, para desaparecer de inmediato. Esa
noche es la que descubrimos cuando miramos a los ojos al hombre, una
noche que se torna cada vez más espantosa: cae ante nosotros la noche
del mundo.
Proverbio alemán
El proverbio es precioso. Yo lo dejaría así:
ResponderEliminarEl hombre es esa noche, esa noche que lo envuelve todo en su simplicidad, una infinita variedad de representaciones, de imágenes, ninguna de la cuales es en ese momento pensada ni está presente. Lo que existe aquí es la noche, la naturaleza en su interioridad, el yo en su pureza. En torno a esas representaciones de magia se cierne la noche: aquí aparece una forma blanca, para desaparecer de inmediato. Esa noche es la descubrimos cuando miramos a los ojos del hombre, una noche que se torna cada vez más pálida: cae ante nosotros la noche del mundo.
Y de título le pondría como el que tiene un poema que escribí: Noches blancas.
* * *
Evidentemente quien escribió el proverbio, me denunciará:)