Lugares deprimentes

Lo único agradable a la vista es el río. En ambas laderas casas destartaladas, ruinosas, desordenadamente dispersas. En el valle la monstruosidad de una población con edificios de 8 plantas y planta urbana, ni pueblo ni ciudad. No es insólito: es el mismo desarrollo que tuvieron las comarcas industriales desde mediados del siglo XIX. Aquí no hay más que ruinas y abandono. La población que queda son ancianos (la mayoría), algunos jóvenes de clases baja y los pocos supervivientes de la heroína. Se paga el nicho en el cementerio como se paga el alquiler de un trastero, es una costumbre del lugar. Todo es pobreza y grisura en estas poblaciones, quien vive contento aquí es porque ha perdido por el camino (si es que la tuvo alguna vez) la luz del intelecto. Cualquier persona inteligente y sensible siente la necesidad de huir de ese valle sofocante. Es inútil allí tratar de cultivar la sensibilidad y la inteligencia, ¿para qué? ¿Quién entendería una fina ironía o una alusión culta? Infiernos como éste son, por desgracia, muy numerosos. Aunque no haya guerra. En estos lugares la vida, cuando florecía, era dura y áspera. Ahora que la decadencia es completa están la estupidez, el aislamiento, la tristeza. Hay muchos cuerpos envilecidos por la sobrealimentación. Las mujeres son vulgares, no saben vestirse. En esta comarca cerrada la expresión más corriente de los vecinos, empleada como muletilla, como un tic, es "cagondios". Nunca saldrán de la miseria en la que viven y no se dan cuenta de la miseria en la que viven. Sobre todo es una miseria intelectual. La injusticia de la vida les ha colocado en ese pozo, porque más que valle es un pozo, como el pozo de una mina. Compadezco a cada niño que nace en ese valle. 

5 comentarios:

  1. Una manera de ver las cosas que, personalmente, encuentro de lo más elitista. SE PUEDE, claro que se puede, "cultivar la sensibilidad y la inteligencia" en un barrio marginal de una gran ciudad, o en un pueblo perdido. Es DE NOSOTROS MISMOS, no del entorno, de quien depende eso. Cosa distinta, muy distinta, es haber nacido en un país del llamado "Tercer Mundo", donde la preocupación tiránicamiente absorbente es mantenerse vivo. Pero en cualquier sitio de España, o de Europa, es perfectamente posible ese "cultivo" que dice; y puede por ejemplo accederse, a través de internet o por otros medios, a cualquier expresión cultural que a uno le interese (y estoy hablando por experiencia, aunque no sólo). Lo demás, a mi parecer, son autojustificaciones banales, o, como dije antes, puro elitismo.

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  2. No es una manera de ver "las cosas", sino de ver "ciertas cosas". Decir que una comarca sufre abandono, pobreza y todos los males que la pobreza trae consigo (la vida es más triste, oscura, breve etc) no veo qué relación puede tener con el elitismo. Donde hay elitismo es en un campus de universidad o en un barrio lujoso: en una comunidad pobre no. Digo la verdad: ese lugar es así. Sus gentes son así. ¿Voy a tener que decir que lo feo es bello, como las brujas de Macbeth, por no caer en el elitismo?

    No creo que sea elitismo, ni puro ni impuro, si digo lo que está mal de un lugar que visito todos los días y con cuya gente trato. Elitista sería pasar de largo, tal vez pronunciando una conferencia en algún ateneo local sobre la liberación de la clase trabajadora, cobrar por ello y decirles "hasta la vista"

    No son en absoluto semejantes un barrio marginal de una gran ciudad y un pueblo perdido. Parece que los equiparas: pues no tienen nada que ver. En un pueblo perdido sí se puede cultivar la sensibilidad y la inteligencia; en barrio marginal, bueno, no hace falta ni decirlo.

    En un ambiente como el que se describe en la nota podrá darse ese "cultivo" a condición de aislarse de los vecinos y, por tanto, de no formar parte de esa comunidad. Porque hablar a sordos es perder el tiempo. En ese lugar no he visto aún a nadie con un libro en la mano. Pero esto es un mal de España, país con poco gusto por la lectura y mucho por las terrazas.

    Populismo o elitismo?

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  3. Yo he vivido durante años en ambos sitios: un barrio marginal de una gran ciudad (donde, por ejemplo, había chabolas), y un pueblo. Y, repito, en ambos sitios pueden cultivarse "la sensibilidad y la inteligencia". ¿Aislarse de los vecinos? No es imprescindible, y nunca ha sido mi caso.
    Así que lo dicho: no estoy de acuerdo.

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    1. Me parece que el ambiente es fundamental para el desarrollo del individuo. Si consideramos el asunto con una perspectiva amplia creo que no somos libres, aunque sea aconsejable actuar como si lo fuéramos.

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    2. El ambiente es fundamental, de acuerdo, pero no decisivo. Respecto a ser o no libres, es vieja discusión. Personalmente, como los estoicos, creo que está en nuestra mano. Que los hechos bien podemos no controlarlos, pero sí nuestro comportamiento frente a ellos. Como suele decirse, hay que jugar con las cartas que a cada uno le toquen. Cuáles sean, eso no depende de nosotros; pero sí el jugarlas lo mejor que podamos. Y eso hace mucho.

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