Son muchos los obstáculos, las obligaciones. Levantarse cada mañana para ir al trabajo es una proeza. Sin embargo ninguno recibe una ovación por realizar esa heroicidad. Nos resignamos a una vida oscura, qué podemos hacer. Son demasiados los obstáculos. ¿Quiénes son nuestros ejemplos? Porque los adultos también son niños asustados, por eso entregan el poder a los más cafres si la situación se pone fea. Una ojeada al mundo actual arroja un panorama desolador. Decía Georges Bernanos "la cólera de los imbéciles domina el mundo". Hoy diría que "la codicia de los imbéciles domina el mundo" Por imbéciles entiéndase esos magnates que hace quince años nadie conocía y hoy son dueños de inmensas fortunas, los amos del planeta. El dueño de Tesla y X, ese abominable reptil de extrema derecha que mete toda la cizaña que puede y es un promotor de la mentira; el empalagoso y siniestro dueño de Meta y Facebook; el miserable dueño de Amazon y el Washington Post; el dueño de Google, etc. Cuando tantísimo poder y riqueza cae en tan pocas manos (son un puñado de elementos) qué se puede esperar más que calamidades. No puedo perdonarle al dueño de Tesla que haya robado el sueño de la conquista del espacio. En 1969 la llegada del hombre a la Luna fue una motivo de celebración general, creo que todo el mundo se sintió partícipe de esa odisea. Una hazaña propia de una sociedad capitalista y científica, es cierto. Ahora salir al espacio es el privilegio de una caterva de milmillonarios que se pueden pagar el billete. Están pensado en escapar de este planeta cuando todo reviente. Ya no viajamos nosotros en esas naves. Han privatizado el cosmos. Como esa duquesa del Infantado (la típica bruja malvada de los cuentos) que cierra un parque infantil en un pueblo de Madrid porque la finca es de su familia y se queda con el castillo. Todo muy legalmente, claro está. Nunca falta un juez que aplique la ley según la conveniencia del más fuerte. Todo a manos privadas: parques infantiles, castillos y sueños del espacio. Cada vez estamos más humillados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario