¿Sádico o cronista de su época?

Die Damen des Kommandanten stopfen dem Mann, ehe er abgeführt wird, den Hals mit Zuckersachen voll. Sein ganzes Leben hat er sich von stinkenden Fischen genährt und muss jetzt Zuckersachen essen! Aber es wäre ja möglich, ich würde nichts einwenden, aber warum schafft man nicht einen neuen Filz an, wie ich ihn seit einem Vierteljahr erbitte. Wie kann man ohne Ekel diesen Filz in den Mund nehmen, an dem mehr als hundert Männer im Sterben gesaugt und gebissen haben?

Las señoras del comandante visitan al condenado y le atiborran la garganta de dulces. ¡Durante toda la vida se alimentó de peces hediondos, y ahora necesita comer dulces! Pero en fin, podríamos pasarlo por alto, yo no protestaría, pero, por qué no quieren conseguirme una nueva mordaza de fieltro, ya que hace tres meses que la pido. ¿Quién podría meterse en la boca, sin asco, una mordaza que más de cien moribundos han chupado y mordido?

En la colonia penitenciaria, Franz Kafka

3 comentarios:

  1. Esos pequeños detalles se hacen grandes cuando se acerca el barquero y que difíciles de ver cuando lo tienes todo. Lo tienes todo cuando no tienes nada.

    ResponderEliminar